E
n los últimos días, dos medicamentos ganaron el centro respecto de la lucha contra el coronavirus. Se trata de antivirales que buscan convertirse en terapias aprobadas para combatir cuadros de Covid-19, y que en algún caso ya lograron una autorización de emergencia. Es el caso del molnupiravir, un tratamiento producido por el laboratorio Merck, que logró el visto bueno de la agencia regulatoria del Reino Unido. Además, Pfizer busca que la FDA de Estados Unidos apruebe Paxlovid, otro tratamiento que presenta nuevas expectativas respecto de su efectividad y seguridad. “La búsqueda de tratamientos sigue siendo necesaria para atender a aquellas personas que terminan hospitalizadas o prevenir la evolución de formas leves y moderadas a formas graves”, sostuvo al respecto la infectóloga Leda Guzzi, integrante de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI). "Más allá de que las vacunas son sin duda la herramienta fundamental para el control de la pandemia, van a seguir existiendo oleadas y casos graves que requieren hospitalización, e incluso van a seguir habiendo fallecidos, sobre todo aquellas personas que tienen enfermedades de base", agregó la especialista. Respecto del tratamiento de Merck, Guzzi, xplicó que el molnupiravir es el segundo antiviral que toma relevancia para tratar el coronavirus, ya que el primero fue el remdesivir “que se aplica en forma endovenosa en pacientes hospitalizados con formas moderadas a graves con requerimiento de oxígeno, un subgrupo en el que demostró alguna eficacia para la prevención de la evolución de la enfermedad y mortalidad”.
Si bien en estos últimos meses aparecieron tratamientos promisorios ninguno quiebra por completo el cuadro y modifica drásticamente la mortalidad
El jueves pasado el Reino Unido se convirtió en el primer país en aprobar el molnupiravir (que se comercializa bajo la marca Lagevrio), un tratamiento en comprimidos contra el coronavirus que el Ministerio de Salud de ese país consideró "histórico" porque "cambiará la situación de los más vulnerables y los inmunodeprimidos". La aprobación surgió de "una revisión rigurosa de su seguridad, calidad y efectividad por parte del ente regulador del Reino Unido y el organismo asesor científico experto independiente del gobierno, la Comisión de Medicamentos Humanos", indicaron las autoridades en un comunicado. "Lo novedoso y promisorio del molnupiravir es que se administra por vía oral y que tiene actividad en las fases tempranas de la enfermedad; es decir cuando el virus se está replicando activamente, y está indicado dentro de los primeros cinco días desde el inicio de síntomas en personas mayores o con factores de riesgo frente a la Covid-19", sostuvo Guzzi. La infectóloga destacó la facilidad de su administración y que no requiere hospitalización para darlo a los pacientes. En tanto, en septiembre pasado la Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció que realizará un nuevo ensayo internacional, el Solidarity Plus, para probar tres nuevas drogas en pacientes hospitalizados con coronavirus: artesunato, imatinib e infliximab. Los tratamientos ya se utilizan para otras indicaciones: el artesunato para el paludismo grave, el imatinib para determinados cánceres y el infliximab en patologías del sistema inmunitario como la enfermedad de Crohn y la artritis reumatoide.
En tanto, el laboratorio Pfizer, uno de los principales productores de la vacuna contra el coronavirus, busca aprobar su propio medicamento, denominado Paxlovid, que según afirmó el laboratorio “redujo en un 89 por ciento la hospitalización y la muerte según el análisis intermedio de la fase de II y III de un estudio realizado con pacientes adultos con Covid-19 no hospitalizados que tienen un alto riesgo de progresar a enfermedad grave”. "La línea de tiempo de los tratamientos frente a Covid-19 es interesante ya que de entrada lo que se buscó fue reposicionar drogas conocidas para otras patologías que podían tener efecto frente al SARS-CoV-2 por sus características del ciclo viral", describió el médico infectólogo Javier Farina. El especialista mencionó como ejemplo el "lopinavir/ritonavir que demostró no ser eficaz, la hidroxicloroquina que también se comprobó fehacientemente que no servía y muchas otras drogas que fueron en ese camino; otras como el molnupiravir, que ya se habían investigado para la influenza, están obteniendo buenos resultados". "También aparecen ahora moléculas nuevas que no tenían estudios de fase 2 como las que se habían reposicionado; entonces han tardado más en surgir en el mercado porque primero tuvieron que demostrar su seguridad y luego la eficacia", sostuvo. Farina señaló que si bien en estos últimos meses "aparecieron tratamientos promisorios" ninguno "quiebra por completo el cuadro y modifica drásticamente la mortalidad" de pacientes con Covid-19. "El gran desafío de todos los tratamiento, sobre todo de las nuevas moléculas que se están desarrollando, es que tienen que ser comercializados con costos que sean accesibles para todos los países; de lo contrario se producirá una inequidad en el acceso de los pacientes al medicamento", concluyó Guzzi.